Поиск по творчеству и критике
Cлово "POR"


А Б В Г Д Е Ж З И Й К Л М Н О П Р С Т У Ф Х Ц Ч Ш Щ Э Ю Я
0-9 A B C D E F G H I J K L M N O P Q R S T U V W X Y Z
Поиск  
1. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo VIII
Входимость: 139. Размер: 68кб.
2. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo II
Входимость: 122. Размер: 61кб.
3. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo V
Входимость: 116. Размер: 61кб.
4. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo X
Входимость: 113. Размер: 57кб.
5. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo VI
Входимость: 110. Размер: 70кб.
6. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo IV
Входимость: 110. Размер: 63кб.
7. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo III
Входимость: 108. Размер: 60кб.
8. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo IX
Входимость: 107. Размер: 67кб.
9. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capitulo VII
Входимость: 103. Размер: 41кб.
10. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo III
Входимость: 99. Размер: 58кб.
11. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo VII
Входимость: 98. Размер: 56кб.
12. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo IV
Входимость: 93. Размер: 50кб.
13. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток)
Входимость: 91. Размер: 51кб.
14. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Cuarta parte. Capitulo V
Входимость: 89. Размер: 55кб.
15. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo V
Входимость: 86. Размер: 59кб.
16. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capitulo XI
Входимость: 82. Размер: 52кб.
17. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo VIII
Входимость: 82. Размер: 58кб.
18. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo primero
Входимость: 80. Размер: 48кб.
19. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo II
Входимость: 80. Размер: 56кб.
20. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo V
Входимость: 80. Размер: 52кб.
21. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo IX
Входимость: 80. Размер: 54кб.
22. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo primero
Входимость: 77. Размер: 44кб.
23. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo III
Входимость: 73. Размер: 45кб.
24. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo II
Входимость: 72. Размер: 44кб.
25. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Quinta parte. Capitulo I
Входимость: 72. Размер: 49кб.
26. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo X
Входимость: 72. Размер: 51кб.
27. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo VI
Входимость: 71. Размер: 42кб.
28. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo IX
Входимость: 71. Размер: 49кб.
29. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo VII
Входимость: 69. Размер: 43кб.
30. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Tercera parte. Capitulo V
Входимость: 69. Размер: 56кб.
31. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Primera parte. Capitulo IV
Входимость: 68. Размер: 36кб.
32. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo XII
Входимость: 68. Размер: 45кб.
33. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo XIII
Входимость: 66. Размер: 38кб.
34. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Segunda parte. Libro VI. Un religioso ruso. Capitulo II. Biografía del starets Zósimo, que descansa en el señor, escrita, según sus propias palabras, por Alexei Fiodorovitch Karamazov
Входимость: 64. Размер: 32кб.
35. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Primera parte. Capitulo III
Входимость: 64. Размер: 37кб.
36. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Segunda parte. Capítulo VI
Входимость: 62. Размер: 59кб.
37. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capitulo VI
Входимость: 61. Размер: 49кб.
38. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Tercera parte. Libro VII. Aliocha. Capítulo III. La cebolla
Входимость: 59. Размер: 42кб.
39. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Segunda parte. Libro V. Pro y contra. Capitulo V. "El gran inquisidor"
Входимость: 59. Размер: 55кб.
40. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Primera parte. Capitulo II
Входимость: 59. Размер: 49кб.
41. Dostoevsky. El jugador (Spanish. Игрок). Capítulo 13
Входимость: 57. Размер: 31кб.
42. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Cuarta parte. Libro XI. Iván Fiodorovitch. Capitulo IX. El diablo. Visiones de Ivan Fiodorovitch
Входимость: 57. Размер: 48кб.
43. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Quinta parte. Capitulo IV
Входимость: 56. Размер: 47кб.
44. Dostoevsky. El jugador (Spanish. Игрок)
Входимость: 56. Размер: 25кб.
45. Dostoevsky. El jugador (Spanish. Игрок). Capitulo 10
Входимость: 55. Размер: 32кб.
46. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo VIII
Входимость: 55. Размер: 25кб.
47. Dostoevsky. El jugador (Spanish. Игрок). Capítulo 5
Входимость: 55. Размер: 23кб.
48. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Sexta parte. Capitulo II
Входимость: 55. Размер: 39кб.
49. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Tercera parte. Capitulo I
Входимость: 53. Размер: 38кб.
50. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Tercera parte. Libro VIII. Mitia. Capitulo VII. El de antaño
Входимость: 53. Размер: 40кб.

Примерный текст на первых найденных страницах

1. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo VIII
Входимость: 139. Размер: 68кб.
Часть текста: sueños y, por así decirlo, ni una sola vez había dormido como Dios manda. A pesar de eso, me levanté pimpante y dispuesto como nunca. Sobre todo no quería encontrarme con mi madre. Con ella no podía hablar más que de un solo tema y temía dejarme apartar de mis propósitos por alguna impresión nueva a imprevista. La mañana era fría, y sobre toda la naturaleza flotaba una bruma húmeda y lechosa. No sé por qué, pero las mañanitas atareadas de Petersburgo, a pesar de su feo aspecto, me agradan siempre y toda esa multitud egoísta y perpetuamente preocupada apresurándose a ir a sus asuntos tiene para mí, a las siete de la rnañana, algo muy seductor. Me gusta sobre todo, yendo de camino, a toda prisa, pedir un dato, o mejor todavía si alguien me pregunta! pregunta y respuesta son siempre breves, claras, netas, pronunciadas sin detenerse y casi siempre amistosas. Es el momento del día en que se está más dispuesto a responder. El petersburgués, por el mediodía o por la tarde, se hace menos comunicativo. Con el menor pretexto se pone a gruñir o a burlarse. Es muy diferente por la mañana temprano antes del trabajo, en el momento más sobrio y más serio. Lo tengo observado. Me dirigí de nuevo hacia Petersbourgskaia storona. Como tenía que estar por fuerza de regreso a la Fontanka (66) para el mediodía en casa de Vassine (al que casi siempre se le solía encontrar en casa a mediodía), apresuré el paso, sin detenerme en ninguna parte, a pesar de las ganas extraordinarias que tenía de tomarme un café aquí o allá. Y luego estaba...
2. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo II
Входимость: 122. Размер: 61кб.
Часть текста: mi primer mes de sueldo en casa del "partícular" en cuestión. No sé me había pedido mi opinión sobre aquella colocación, se me había entregado simplemente, por las buenas, a mi patrón, creo, el primer día de mi llegada. Era demasiado grosero, y casi me vi obligado a protestar. El sitio estába en casa del viejo príncipe Sokolski. Pero protestar inmediatamente habría sido romper de golpe con ellos, lo que no me asustaba en lo más mínimo, pero era contrario a mis objetivos esenciales. Así, pues, acepté la colocación, esperando, sin decir palabra; defender mi dignidad con mi silencio. Diré ahora mismo que este príncipe Sokolski, rico y consejero privado (12), no era en forma alguna pariente de los príncipes Sokolski de Moscú (miserables desde hacía varias generaciones) con los que Versilov estaba enfrentado en aquel proceso. Lo único que tenían de semejante era el apellido. Sin embargo, el viejo príncipe se interesaba mucho por ellos y quería de uná manera muy especial a uno de ellos, el jefe por así decirlo de la familia, un oficial joven. Versilov, hasta hacía poco, había tenido una influencia inmensa en los asuntos de aquel viejo y era su amigo, un amigo muy singular, puesto que aquel pobre príncipe, según he podido darme cuenta, le tenía un miedo terrible, no solamente en la época que entré a su servicio, sino también, creo, en todo el tiempo que duró aquella amistad. Por lo demás, desde hacía tiempo, ya no se veían; el acto deshonroso del que se acusaba a Versilov afectaba directamente a la familia del príncipe; pero Tatiana Pavlovna se encontró alií muy a...
3. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo V
Входимость: 116. Размер: 61кб.
Часть текста: La cosa es de una sencillez infinita; todo el secreto consiste en dos palabras: terquedad y continuidad. -Ya sabemos eso - se me dirá -; no es novedad ninguna. En Alemania, cada "Vater" se lo repite a sus hijos. Y sin embargo su Rothschild de usted (el difunto James Rothschild, de París, al que me refiero) ha sido siempre único, mientras que hay millones de "Vater". Responderé: -Ustedes aseguran que ya lo saben. Pues bien, no saben absolutamente nada. Existe un punto sin embargo en el que ustedes tienen razón: si he dicho que es una cosa "infinitamente simple", me he olvidado de añadir que es también la más difícil. Todas las religiones y todas las morales del mundo se reducen a esto: "Hay que amar la virtud y huir del vicio." Cómo, parece que haya nada más sencillo? Pues bien, haced algo virtuoso, huid de uno solo cualquiera de vuestros vicios, ensayadlo un poco! Todo consiste en eso. He aquí por qué vuestros innumerables "Vater", durante una infinidad de siglos, pueden repetir esas dos palabras asombrosas en las que estriba todo el secreto, mientras que sin embargo Rothschild sigue siendo único. Por tanto, no se trata de éso en absoluto, y los "Vater" no repiten en modo alguno el pensamiento que sería necesario. En cuanto a la...
4. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo X
Входимость: 113. Размер: 57кб.
Часть текста: historia tantos incidentes fortuitos, que, sin explicaciones previas, sería imposible saber a qué atenerse. Se trataba de aquel "saco" del que había hablado Tatiana Pavlovna. Consistía en que Ana Andreievna se había arriesgado, por fin, a dar el paso más osado que hubiera sido posible imaginarse en su situación. He ahí verdaderamente un carácter! Aunque el viejo príncipe, bajo pretexto de su delicada salud, hubiese sido confinado en Tsarskoie-Selo, de forma que la noticia de su proyectado casamiento con Ana Andreievna no había podido propagarse por el gran mundo y había sido de momento, por así decirlo, ahogada en germen, el débil anciano, del que se podía concebir todo, no habría consentido jamás, por nada en el mundo, en abandonar su idea y en traicionar a Ana Andreievna, que le había pedido que se casara con ella. En este aspecto era un caballero; tarde o temprano, podría levantarse de repente y poner en ejecución su proyecto con una energía indomable, cosa que sucede tan a menudo, precisamente en los caracteres débiles, porque hay un límite más allá del cual no conviene empujarlos. Además se daba cuenta perfectamente de la situación delicada de Ana Andreievna, a la que respetaba infinitamente, así como de la posibilidad de rumores, burlas y comentarios de mal gusto a cuenta de ella. La que lo calmaba y lo detenía de momento, era únicamente que Catalina Nicolaievna no se había permitido nunca, ni con palabras, ni por alusiones, emitir en su presencia una opinion molesta sobre Ana Andreievna, ni manifestar nada contra su intención de casarse con ella. Por el contrario, testimoniaba una alegría extrema, una extremada atención hacia la novia de su padre. Ana Andreievna ae hallaba por tanto en una...
5. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo VI
Входимость: 110. Размер: 70кб.
Часть текста: son menos rápidas en dispersarse, aunque yo no sea rencoroso. Cuando entré, me di cuenta de que mi madre acababa de interrumpir en aquel instante y a toda prisa el hilo de su conversación, por lo visto muy animada, con Tatiana Pavlovna. Mi hermana había vuelto del trabajo apenas un minuto antes que yo y aún no había salido de su habitación. Aquel partido se componía de tres habitaciones: aquella en la que todo el mundo se reunía según la costumbre, la habitación del medio o salón, era bastante espaciosa y hasta conveniente. Se veían allí divanes rojos y blandos, por lo demás pasablemente usados (Versilov no soportaba las fundas), algunos tapices, varias mesas veladores inútiles. Seguidamente, a la derecha, se abría el cuarto de Versilov, estrecho y exiguo, con una sola ventana; había allí una miserable mesa de escritorio sobre la que se arrastraban varios libros abandonados y papeles olvidados, y delante de la mesa un no menos lastimoso sillón blando, cuyos muelles rotos apuntaban al aire, lo que con frecuencia...
6. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo IV
Входимость: 110. Размер: 63кб.
Часть текста: y a explicar una cosa de la que yo no sabía nada por aquella época, pero que he conocido y que me he explicado perfectamente muchísimo después, cuando todo estaba ya acabado. De lo contrario, no podría ser claro, tendría que explicarme por enigmas. Así, pues, daré esta explicación franca y sencilla, sacrificando el pretendido lado artístico, y lo haré como si no fuese yo quien escribiera, sin que mi corazón esté interesado en ello, bajo la forma de una especie d'entre-filet de periódico. Lambert, mi camarada de infancia, habría podido muy bien y casi literalmente estar afiliado a esas innobles bandas de pequeños intrigantes que se asocian con objeto de lo que hoy se llama "chantage" y que caen ahora bajo el peso de ciertas definiciones y penas del código. La banda en la que participaba Lambert se había formado en Moscú y había cometido ya allí no pocas fechorías (posteriormente fueron descubiertas en parte). Supe después que en Moscú habían tenido, durante algún tiempo, a un dirigente extraordinariamente experimentado y no tonto del todo, un hombre ya maduro. Ejecutaban sus empresas, bien toda la banda junta, bien por grupos. Al lado de cosas extremadamente sucias a indecibles (de las que por otra parte se ha hablado en los periódicos), se entregaban también a empresas bastante...
7. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo III
Входимость: 108. Размер: 60кб.
Часть текста: volvería a meterme en la cama. Experimentaba en todo mi ser la cercanía de la curación. Todos estos menudos detalles no valdrían quizá la pena de ser anotados, pero entonces sobrevino una serie de días en los cuales no se produjo nada de particular, y que, no obstante, han permanecido todos en mi memoria como algo tranquilo y gozoso: es una rareza en mis recuerdos. De momento, no hablaré de mi estado mental; si el lector supiese en qué consistía, no querría creerlo. Conviene más que esto resalte más tarde por los hechos. Mientras tanto, diré solamente esto: que el lector se acuerde de un alma de araña (118). Y de esto, de la habitación desde la que quería abandonarlos y, con ellos, al mundo entero, en nombre de "la belleza". El anhelo de belleza estaba en su colmo, eso era una gran verdad, pero la forma en que pudo aliarse con otros anhelos, y cuáles!, es para mí un misterio. Eso siempre ha sido un misterio, y mil veces me he asombrado de esta facultad que tiene el hombre (y, creo, por excelencia el hombre ruso) de mecer su corazón a una altura sublime y junto a la peor bajeza, y siempre con una absoluta sinceridad. Sobre si esta famosa amplitud de espíritu del ruso, que lo conducirá lejos, es eso, amplitud de espíritu, o si es sencillamente bajeza, la cuestión queda sin dilucidar. Pero dejemos esto. De una manera o de otra, se produjo una calma. Yo había comprendido que era preciso a toda costa volver a estar sano y lo más pronto posible, para comenzar lo más pronto posible a obrar, y por eso decidí vivir higiénicamente, y escuchar al doctor (cualquiera que fuese), aplazando las intenciones belicosas, con una...
8. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo IX
Входимость: 107. Размер: 67кб.
Часть текста: eso estaba contento. Sin hablar de lo demás, estaba seguro al menos de que, por haber adoptado aquel tono, yo había borrado todo lo que había de ridículo en mi posición. Pero no tuve tiempo de pensar largamente en todo aquello: mi cerebro estaba ocupado por Kraft. No es que me atormentase mucho, pero a pesar de todo yo estaba conmovido hasta el fondo del alma; y hasta el punto de que el sentimiento ordinario de placer que experimentan los hombres en presencia de la desgracia del prójimo, por ejemplo cuando alguien se rompe una pierna, pierde el honor, se ve privado de un ser querido, etc., aquel mismo sentimiento ordinario de innoble satisfacción cedía en mí enteramente a otro sentimiento, a una sensación extremadamente imperiosa, a la pena, al dolor... si es que aquello era el dolor, lo ignoro... en todo caso a un sentimiento extremadamente poderoso y bueno. Y por aquello también estaba yo contento. Es asombrosa la multitud de ideas extrañas que pueden atravesarle a uno el espíritu...
9. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capitulo VII
Входимость: 103. Размер: 41кб.
Часть текста: sido un poco más experimentado, habría debido adivinar que la menor duda en semejante asunto hay que interpretarla en el sentido malo. Pero estaba desorientado por otras circunstancias: no comprendía por qué tenía que alegrarme, pero el caso era que me hallaba presa de un regocijo loco, a pesar de mis dudas y del claro convencimiento que tenía de haber sufrido allá abajo un rotundo fracaso. Incluso las injurias rabiosas de Tatiana Pavlovna me parecían divertidas y graciosas, y no me enfadaban lo más mínimo. Aquello era sin duda porque, a pesar de todo, yo había roto mis cadenas y por primera vez me sentía en libertad. Sentía también que había estropeado mis asuntos: cómo obrar ahora con respecto a la carta sobre la herencia? La cuestión se tornaba aún más tenebrosa. Seguramente iban a creer que yo quería vengarme de Versilov. Pero mientras estábamos en el salón, durante todos aquellos...
10. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo III
Входимость: 99. Размер: 58кб.
Часть текста: superior absorbía todos los detalles, un sentimiento potente compensaba para mí todo el resto. Salí sumido en una especie de entusiasmo. Al poner el pie en la calle, estaba dispuesto a echarme a cantar. Como hecha adrede, la mañana era espléndida: sol, transeúntes, ruido, movimiento, alegría, muchedumbre. Cómo, es que esa mujer no me ha ofendido? De quién habría yo tolerado aquella mirada y aquella sonrisa insolente sin una protesta inmediata, por tonta que fuera, poco importa, de mi parte? Y notadlo, había llegado justamente con la idea de ofenderme lo antes posible, antes de haberme visto: yo era a sus ojos "el comisionado de Versilov", y estaba persuadida ya en aquel momento, y lo ha seguido estando mucho tiempo después, de que Versilov tenía entre sus manos todo el destino de ella y tenía el medio de perderla en el momento mismo, si quisiera, gracias a un determinado documento; por lo menos ella lo sospechaba. Era un duelo a muerte. Pues bien, sin embargo yo no estaba ofendido. Había ofensa, pero yo no la sentía. Qué digo?, estaba incluso contento; venido para odiar, sentía incluso que empezaba a amarla. "Me pregunto si la araña puede odiar a la mosca a la que acecha y a la que atrapa. Querida mosca! Me parece que uno quiere a su víctima; por lo menos se la puede amar. De esta manera yo, por lo...